Nikken ha sido consciente desde hace años de los beneficios de los sillones negativos. Por eso los ha incorporado en la mayoría de sus productos
Las investigaciones más importantes sobre los efectos de la ionización negativa se remonta ya hace bastantes años. Precisamente fue en 1993 cuando distintas investigaciones británicas se realizaron en relación con este tipo de ionización.
En esa fecha se llevaron a cabo diferentes experimentos exponiendo a distintas personas del sexo masculino a iones negativos y midiendo posteriormente sus respuestas. Este reflejo fisiológico incluirá la temperatura corporal, la tasa cardiaca y la respiración en reposo y durante el ejercicio.
Los resultados fueron concluyentes. Se pudo comprobar que los iones negativos mejoraron todos los estados fisiológicos, especialmente cuando los sujetos estaban descansando en el reposo. Pero que el resultado más importante que me ha sorprendido del estudio fue que se encontró que los iones negativos eran biológicamente activos. Y que afectaban de forma positiva los ritmos cardíacos del cuerpo.
Los beneficios de los iones negativos y su respaldo por la ciencia
Otro ensayo fechado en el 2006 mostró a los científicos el efecto de los iones negativos en el estrés fisiológico y psicológico durante un experimento realizado durante dos horas utilizando el ordenador. Al controlar la tasa cardíaca durante el experimento descubrieron que cuando se exponía a los participantes ahí iones negativos se producía una mejora considerable antes de iniciar el ensayo.
Al mismo tiempo se pudo comprobar una reducción significativa en la tasa de estrés producido por el los ordenador. También una reducción considerable en el estrés psicológico. Pero también en otros dos grupos del experimento, un grupo de control y un grupo de placebo, los registros los registros no llegaron a experimentar ningún cambio significativo.
En 1969 investigadores franceses llevaron acabo una prueba sobre un grupo de personas que habrían sufrido anteriormente insomnio y pesadillas. Su problema de sueño era como consecuencia de una sobre exposición de serotonina, una sustancia química natural que indica nuestro cuerpo que es hora de dormir.
Sí, la mayoría de los participantes logró dormir mucho mejor usando un purificador de aire con iones negativos que filtrara el raíz de la habitación donde se realizaba el experimento.