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Es esencial para el organismo y el bienestar. Dormir bien es igual a salud. El sueño deficiente causa un sinfín de problemas.
Es una máxima unánime en todos los especialistas. Dormir bien es igual a salud. Un buen sueño es un requisito indispensable para que el organismo pueda realizar muchos de sus procesos.
Mantener la salud cerebral. Si no se duerme bien o lo suficiente, se produce la degeneración neuronal lo que trae consigo muchos problemas como la demencia. Muchas investigaciones han dado por sentado que el sueño deficiente e intermitente produce daños en el cerebro que son irreversibles. Tales el caso de la pérdida de neuronas que afectan a ciertos procesos cognitivos. También está demostrado que las personas con problemas crónicos de sueño son más propensos a desarrollar la enfermedad de Alzheimer.
Mantener apunto del reloj biológico.Los desajustes en el estado biológico traen consigo una serie de efectos negativos. Así es el caso del aumento de la presión arterial, el desequilibrio de la hermana del hambre y en los niveles de azúcar. También, aumentar el riesgo de padecer diabetes, cáncer, estrés y muchos más problemas de salud.
Eliminación de los desechos tóxicos. El sistema glinfático aumenta su actividad durante el sueño profundo y ayuda al cerebro a eliminar toxinas. Con el sueño nuestro sistema de recuperación lleva los desechos del cerebro de vuelta al sistema circulatorio. De ahí a los distintos órganos que producen y activan eliminación de seguido.
Dormir bien es igual a salud. Esencial para el aprendizaje
El sueño permite a nuestro cerebro asentar todo tipo de información. De tal manera que en la fase de sueño se agrupan diferentes percepciones y patrones que permiten entender el mundo que nos rodea.
Así, según muchos especialistas, el buen sueño es esencial para el aprendizaje. Esto es crucial durante las etapas de desarrollo y en todas las fases en esta vida donde desarrollemos una alta capacidad intelectual y formativa.